En una larga tradición de medios al servicio del poder, que aún se mantiene vigente, en la actualidad se registra una concentración del espectro en medios privados y crece la presión ejercida por el algoritmo de las redes sociales.
En el XX Encuentro Internacional de Periodistas de la FIL de Guadalajara, Julio Hernández López, periodista de La Jornada y conductor del noticiero Astillero Informa y Jenaro Villamil, Director del Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano, analizaron el papel del poder y la apertura de los medios de comunicación en la charla “Democratizar los medios”.
Julio Hernández describió cómo los poderes usan la comunicación para entregar el mensaje más conveniente al grueso de la población. “En los poderes, la comunicación social sirve a sistemas políticos opresores, son solidarios con los poderes en turno, y son manejados para la distorsión de la realidad y para el gusto de los poderes en turno”.
Ante este escenario, dijo que el gobierno del Expresidente Andrés Manuel López Obrador y el tiempo que lleva Claudia Sheinbaum como presidenta, persiste una reticencia por empujar una reforma de medios de comunicación como la relacionada con el enriquecimiento desmedido de los empresarios durante el último sexenio.
“Falta voluntad política porque ya ha comprobado que puede sacar adelante lo que desee en los procesos legislativos, en la Cámara de Diputados. La realidad es que los medios públicos están en crisis y podría ser posible una reforma profunda de los medios de comunicación”, añadió.
Jenaro Villamil detalló cómo los medios privados concentran la radiodifusión: Televisa tiene 420; TV Azteca 270; Imagen 70 y el Sistema Público de Radiodifusión, 51.
“La radio aparentaba la pluralidad de concesionarios, aunque hay un discurso de derecha en las estaciones comerciales y la oferta más plural se dispersa en la radio pública universitaria, comunitaria y de gobiernos locales que fomentan la fragmentación”, declaró.
Aseguró que se terminará por democratizar la concentración de medios, y todavía más desafiante, democratizar el poder del algoritmo presente en programas independientes o públicos.
“Su secreto y esencia es ser opaco, y nadie sabe por qué nos ‘algoritmean’; por ello, los contenidos no alcanzan una difusión mayor en ciertas plataformas como YouTube y TikTok, condicionadas a variables que sólo conocen los dueños, patrocinadores y publicistas”, subrayó Villamil.
Para contrarrestar el algoritmo de plataformas que censuran temáticas específicas o al gobierno que controla a través del dinero público, Julio Hernández propuso un periodismo equilibrado y crítico del poder.
“El verdadero periodismo debe nutrir, enseñar y ayudar a entender, y que no se entregue al encanto del poder y que señale las grandes distorsiones de éste”, concluyó.
El Subdirector de Red Radio Universidad de Guadalajara, Víctor Magaña Hernández, moderador de la charla, precisó que hablar de democratizar los medios implica abordar una pregunta relevante, ¿cómo garantizamos que la información sea plural, incluyente y accesible para todas las personas sin importar su origen, clase social o lugar de residencia?
“En un país como México, donde la concentración de los medios de comunicación está en pocas manos, el reto de democratizarlos trasciende lo técnico, es una cuestión de justicia social. La democratización no sólo significa diversificar las voces que participan en el ecosistema mediático, sino generar espacios donde estas voces sean escuchadas, respetadas y tengan impacto”, compartió.
Atentamente
“Piensa y Trabaja”
“30 Años de la Autonomía de la Universidad de Guadalajara y de su organización en Red”
Guadalajara, Jalisco, 7 de diciembre de 2024
Texto: Adrián Montiel González
Fotografía: Fernanda Velazquez
