Veintidós académicos de países como España, Brasil, Uruguay y México abordan el acoso escolar desde diferentes enfoques y contextos en el libro “Las violencias en los entornos escolares”, mismo que este lunes presentaron en CUCEA, el jefe de la Unidad de Formación Académica de este Centro Universitario, Claudio Carrillo Navarro y la secretaria ejecutiva del Consejo Interinstitucional de Investigación Educativa de la Secretaría de Educación Jalisco (CIIE), Ruth Perales Ponce.
El doctor Claudio Carrillo Navarro, coordinador del libro y coautor del capítulo titulado “Una exploración del bullying en ambientes femeninos. Las garras de la acosadora no se ven cuando se ocultan bajo la fachada de la amistad”, mencionó que en su estudio, que es de corte cualitativo, observaron que entre los estudiantes de secundaria, las mujeres suelen ejercer violencia hacia los hombres. Sin embargo son más agresivas y violentas entre ellas mismas, en comparación a como lo son con sus compañeros.
“Hemos detectado a mujeres que controlan a los hombres no sólo ejerciendo violencia psicológica, sino también física (como golpes y jaloneos). Suelen hacer insultos velados. Además pueden llegar a utilizar al otro como herramienta para satisfacer una necesidad”, agregó.
Enfatizó que las mujeres, cuando se trata de ejercer la violencia con otras compañeras, utilizan mecanismos como el rumor y la descalificación. Además que practican, con mayor frecuencia, la violencia psicológica, seguida por la verbal.
Señaló que entre las mujeres, aspectos como la visibilidad o la apariencia física generan conflicto. “A partir de la negación o la disminución de la otra logran ser establecidos mecanismos de control y de dominio, motivo que es casi inexistente entre los hombres. Ellos no acostumbran a discutir entre sí por un tema de apariencia”.
El académico puntualizó también que los hombres suelen ejercer un tipo de violencia que tiene que ver con rituales de control, dominio y territorialidad, en donde el uso de la fuerza es muy recurrente, ya que es la expresión más contundente de que alguien domina determinado espacio.
La agresividad de ellos hacia ellas regularmente está marcada por el sometimiento y el control, en un contexto de cultura patriarcal, donde las mujeres, en ocasiones, legitiman que haya cierto tipo de comportamientos donde la parte dominante está del lado masculino, explicó.
Agregó que la violencia puede afectar la manera en que es visto y valorado el adolescente frente a los otros, lo que a su vez le genera problemas cómo depresión y manifestaciones de tristeza o aislamiento.
Ruth Perales Ponce, quien fungió como presentadora, destacó la preocupación de los investigadores que participaron con sus aportaciones en el libro, las cuales tuvieron la finalidad de generar un espacio de diálogo sobre el fenómeno de la violencia escolar.
A T E N T A M E N T E
"Piensa y Trabaja"
Guadalajara, Jalisco, 11 de julio 2016
Texto: Martha Eva Loera
Fotografía: José María Martínez