La política petrolera en México está subordinada a las de carácter hacendario y de relaciones exteriores, ya que en la actualidad Petróleos Mexicanos entrega la mitad de su producción a los Estados Unidos y sus ingresos a la Secretaría de Hacienda, aseguró la académica de la Universidad de Guadalajara, Yolanda Ornelas Uribe.
La profesora del Departamento de Estudios Políticos, del CUCSH, agregó que la soberanía nacional radica en el control de las reglas del juego, no en la propiedad de los medios de producción. Además, significa un mayor bienestar para los mexicanos, no un monopolio que sirva como trofeo de políticos y sindicatos.
“México sería más soberano, si hubiese libre competencia en productos derivados del petróleo transformados dentro de nuestro territorio, con producto extraído por Pemex. Entonces sí sería el petróleo una palanca de nuestro desarrollo, un proyecto para el crecimiento económico”.
Reiteró la dependencia hacia el vecino país del norte. Nuestro principal cliente se encarga de procesar la materia prima obtenida del subsuelo nacional y nos la venden en productos con valor agregado y a precios altos, agregó durante una mesa redonda acerca de la reforma energética en México.
Durante el acto efectuado este miércoles en el auditorio Adalberto Navarro, del CUCSH, el analista y exfuncionario electoral Esteban Garaiz Izarra, tras coincidir con la académica en que el tema energético “es la parte medular de lo que quede de la soberanía nacional”, dijo que Pemex es una empresa paraestatal rentable y competitiva.
Ante estudiantes y académicos, explicó: a Pemex le cuesta producir un barril de petróleo en promedio cuatro y medio dólares, mientras que el precio internacional está arriba de 80 dólares. Es decir, le queda alrededor de 75 dólares “libres de polvo y paja por cada uno de los casi tres millones de barriles que produce diario”.
Otro dato, de acuerdo con cifras oficiales, es que el promedio internacional para producir un barril está por encima de los ocho dólares, y en México se produce a la mitad. A pesar de estas ventajas, Pemex es la empresa petrolera que más impuestos y derechos paga en el mundo.
“Hacienda le cobra 70 por ciento de sus ventas. El problema verdadero de Pemex se llama Secretaría de Hacienda”. En 2007, Hacienda cobró a Pemex más que sus utilidades brutas, más del 100 por ciento. Es decir, 676 mil millones de pesos, siendo que de utilidad bruta Pemex obtuvo 509 mil millones de pesos.
Ornelas Uribe y Esteban Garaiz, tras comentar que urge una reforma energética, plantearon: es necesario conocer a dónde van los recursos excedentes de los últimos años. Es vital una fuerte inversión pública para más infraestructura, refinerías y ductos; una reforma fiscal y transparencia en todos sus procesos.
“Se requiere una reforma petrolera. La planteada por el ejecutivo, los partidos de oposición y demás, ofrece en parte la solución, pero se deberá llegar a un consenso. Todos quisiéramos que el petróleo siguiera en manos del Estado, si esto significa que tendremos acceso a los recursos sin tener que pagar un precio excesivo; que garanticen un mayor desarrollo y crecimiento económico, y aseguren la producción para las generaciones futuras. Todo ello no está garantizado”.
Guadalajara, Jal., 17 de septiembre de 2008
Texto: Eduardo Carrillo
Fotografía: Internet
Edición de noticias: LCC Lupita Cárdenas Cuevas