En emotivo acto realizado en el distribuidor de salas del Antiguo Hospital Civil “Fray Antonio Alcalde”, se rindió homenaje de cuerpo presente al decano de la medicina interna en Jalisco y México, connotado especialista, académico, científico e investigador con reconocimiento internacional, Mario Paredes Espinosa, fundador en 1966 y jefe del Servicio de Medicina Interna hasta sus últimos días en el Antiguo Hospital Civil de Guadalajara, institución a la que entregó más de 50 años de su vida profesional y académica, dedicada en paralelo a su entrañable Universidad de Guadalajara.
Su trayectoria profesional destacó por el constante y notable impulso al avance de la medicina y de la ciencia a favor de la asistencia y la enseñanza médica, así como sus aportes y estudios en materia de enfermedades tropicales y cáncer, rubro este último en el que fue pionero del uso de la quimioterapia en el estado de Jalisco.
El homenaje al reconocido médico universitario, quien se destacó por sus aportaciones a la medicina en Jalisco, en el país y el extranjero, fue encabezado por el Rector general de la Universidad de Guadalajara, doctor Marco Antonio Cortés Guardado, acompañado por las más altas autoridades hospitalarias, universitarias, así como familiares y amigos del galeno.
La semblanza estuvo a cargo del doctor Rigoberto Navarro Ibarra, director del Antiguo Hospital Civil “Fray Antonio Alcalde”, quien enmarcó las aportaciones del especialista que en su momento fungiera como director médico del Hospital Civil (1966-68), director de la Escuela de Medicina de la Universidad de Guadalajara (1970-72), director de la Clínica de Cáncer del Estado de Jalisco y jefe del Servicio de Cancerología del Hospital Civil de Guadalajara (1960-1966).
Por su parte, el doctor Jaime Agustín González Álvarez, director general del Hospital Civil de Guadalajara y discípulo del maestro Paredes en su formación como especialista de la medicina interna, recordó que durante su graduación cómo médico internista, el doctor Mario Paredes Espinosa le hizo saber que ya podía ver al paciente a los ojos, pero que su labor y capacitación no terminaban con ello.
Médico, servidor y maestro, fueron los adjetivos que el doctor Marco Antonio Cortés Guardado, Rector general de la Universidad de Guadalajara, atribuyó durante sus palabras dedicadas al homenajeado, cuya memoria instó a honrar debidamente, y exhortó a los ciudadanos, servidores públicos y universitarios a tomar sus virtudes como ejemplo. El doctor Héctor Raúl Pérez Gómez, en su calidad de exdirector del Antiguo Hospital Civil de Guadalajara y actual rector del Centro Universitario de Ciencias de la Salud, también se sumó a las condolencias con un sentido mensaje pronunciado durante el acto luctuoso.
La primer guardia de honor estuvo presidida por el Rector general de la máxima casa de estudios, autoridades hospitalarias, el doctor Martín Vargas Magaña, secretario general del Sindicato de Trabajadores Académicos de la UdeG, el doctor Héctor Gallardo Rincón, director de Soluciones en Salud de la Fundación Carlos Slim de la Salud y también discípulo del doctor Paredes como especialista en medicina interna, entre otros.
El doctor Mario Paredes Espinosa se destacó en el campo de la investigación, principalmente en tópicos como cáncer y enfermedades tropicales.
Contribuyó para que continuaran las obras iniciadas tiempo atrás, tanto del Nuevo Hospital Civil de Guadalajara como la construcción de la Torre de Especialidades del Antiguo Hospital Civil de Guadalajara, la del Instituto Dermatológico “José Barba Rubio” y en la realización de los murales del artista Gabriel Flores, que se encuentran plasmados en las cúpulas del Hospital Civil de Guadalajara, recinto bicentenario y testigo del ejercicio médico y entrega a su labor asistencial y académica.
Guadalajara, Jal., 29 de agosto de 2011.
Texto: HCG
Fotografía: Jorge Iñiguez
Edición de noticias: Lupita Cárdenas Cuevas