Es necesario modificar el concepto de democracia actual, que hasta ahora se basa en la igualdad de derechos, consideró el presidente del Estado de Israel, Shimon Peres, quien agregó que ahora tenemos el derecho a ser diferentes. “Si damos legitimidad a las diferencias no necesitamos la tolerancia”, dijo en el diálogo que sostuvo con el ex presidente de España, Felipe González, en el auditorio Juan Rulfo, durante el primer día de actividades de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL).
González refirió que ante la actual crisis de gobierno global, es vital “más que nunca la comprensión y respeto del otro”, así como la política y la gobernanza. “Mientras no se llegue a comprender al otro, que es la aceptación de la riqueza biodiversa del ser humano, con diferentes sentimientos de pertenencia, prefiero que haya un cierto nivel de tolerancia, que todavía no veo”.
Al acto asistieron el Rector General de la Universidad de Guadalajara, maestro Itzcóatl Tonatiuh Bravo Padilla y el Presidente de la FIL, licenciado Raúl Padilla López, quien presentó a los participantes.
Los estadistas, como los llamó el escritor e historiador mexicano Enrique Krauze, moderador del encuentro, hablaron sobre religión, ciencia, racismo, política, entre otros temas. El historiador los calificó como “referentes ineludibles en el devenir de las relaciones internacionales en pasado, presente y futuro”.
Respecto al desarrollo de la comunicación, González afirmó que a finales del Siglo XX y principios del actual, dos fenómenos convergieron: la desaparición de la alternativa comunista y la revolución de la comunicación entre los seres humanos. “La desaparición de la barrera del tiempo espacio para comunicarse entre los seres humanos. Esos dos cambios han significado un triunfo efímero del Occidente desarrollado. Estamos viviendo un cambio de paradigmas, y el presente y futuro es la sociedad del conocimiento. Es un punto de nacimiento de los nacionalismos excluyentes.
Peres, Premio Nobel de la Paz en 1994, dijo que la historia es un error continuo, “Construyamos un nuevo mundo. Creo que estamos en un periodo transitorio, tenemos una nueva situación pero una mentalidad o una administración anticuada”.
Por su parte González indicó: a mí no me importa la afirmación de la identidad, me importa que la afirmación de la identidad excluya al otro, porque entonces se hace totalitaria y fanática. La democracia en el siglo XXI no solo tiene que administrar la pluralidad de las ideas, sino también gobernar la diversidad de sentimientos de pertenencia que constituyen las identidades.
A T E N T A M E N T E
“Piensa y Trabaja”
Guadalajara, Jal., 30 de noviembre de 2013
Texto: Eduardo Carrillo
Fotografía: Abraham Aréchiga