Convertido en una especie de procurador moral de la nación, el poeta y activista Javier Sicilia le exigió al presidente de México, Felipe Calderón Hinojosa, “que entregue ese dinero que le hace falta a la Universidad y, si quiere hacer justicia y rehacer el tejido social, que invierta lo mismo en educación que lo que invierte en dinero contra la violencia”. Lo anterior durante la entrega que le hizo la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU), de la presea “Corazón de León”.
Reunido frente a un abarrotado Paraninfo, junto con el vicerrector de la UdeG, Miguel Ángel Navarro Navarro; el presidente de la FEU, Marco Antonio Núñez Becerra, y dentro del público, el escritor Fernando del Paso, Javier Sicilia desnudó las instituciones del país a las que calificó como “podridas” y en la que urgió a “recuperar la vida ciudadana” y a través de ello “recuperar la soberanía”.
“Pagamos a instituciones que no hacen nada y que le hacen el juego a la criminalidad. Tiene que haber una presión ciudadana que termine con la impunidad, porque la seguridad y la justicia en este país no existen. Esa es la razón por la que tienen que continuar las movilizaciones hasta que logremos ciudadanizar el Estado. No podemos aceptar que nos instalen el horror y el miedo, pues podríamos llegar a tener un Estado militarizado”.
Al inicio de su charla, Javier Sicilia agregó que cuatro muchachos: Gabriel, Luis, Julio y su hijo Francisco, “destaparon” algo que estaba ahí y que nadie quería ver. “Eso es algo que hacen los poetas, y lo que hicimos fue comenzar a nombrar a las víctimas y a denunciar esta guerra fallida, con sus estadísticas estúpidas y sus bajas colaterales. Empezamos a nombrar lo inhumano y entonces comenzó a surgir el dolor de esta nación y surgió también toda su reserva moral”.
“Los 40 mil muertos y los casi 10 mil desaparecidos, que pueden ser mucho más, son jóvenes en su mayoría, que por falta de oportunidades se están convirtiendo en el ejército de reserva de la delincuencia. Hay que tratar la lucha contra la delincuencia de manera holística, porque seguridad nacional no solo implica protección (militar) sino dignidad al campo, a la educación, a la vida y a los valores. Es así que buscamos cambiar la estrategia de la guerra de Calderón y la Ley de seguridad”.
A Núñez Becerra le correspondió entregar la presea “Corazón de León”. Durante su intervención mencionó que “políticos y criminales ya no tienen corazón”, porque “también son criminales los gobernantes que nos dan ignorancia, injusticia, miseria. Es por eso que “el corazón de Javier Sicilia es más grande que su dolor y su corazón es lo que nos faltaba. Sus motivos son nuestros motivos y su lucha es nuestra lucha: un país sin guerra y en paz”.
Guadalajara, Jal., 12 de julio de 2011
Texto: Juan Carrillo Armenta
Fotografía: Adriana González
Edición de noticias: Lupita Cárdenas Cuevas
México está en estado de emergencia: Javier Sicilia
Le exige a Felipe Calderón entregarle recursos a la UdeG e invertir lo mismo en educación que contra la violencia