Los Puestos Centinela (PC) que ya están instalados en los edificios de la administración general, tendrán seis acciones básicas a realizar: servir como filtro para detectar posibles casos de Influenza A (H1N1); informar a la población; detectar casos; referirlos; registrarlos y seguir los casos con la participación de familiares e instituciones de salud.
El epidemiólogo del Hospital Civil Juan I. Menchaca, y miembro del Comité Universitario Único para la Contingencia ante la Influenza A (H1N1), Augusto Mario Ramírez Riestra, además de ser uno de los responsables de los PC, señala que lo importante será detectar y caracterizar de manera temprana y oportuna cualquier caso. “Cada PC tendrá un lugar fijo, accesible al ingreso de las instalaciones universitarias, con por lo menos tres integrantes. Lo importante es que el total de los estudiantes sea revisado por los integrantes del puesto”.
Agrega que también habrá un segundo nivel, las llamadas Unidades Centinelas (UCe), conformada por las autoridades de los centros universitarios, de las escuelas preparatorias del Sistema de Educación Media Superior (SEMS), y de las instalaciones administrativas de la Universidad de Guadalajara. “Cada UCe mantiene una línea directa de comunicación con la red universitaria y tendrá la facultad de realizar la gestión intermedia de sus necesidades, con el objetivo de que el PC proporcione los resultados esperados (prevenir los casos)”.
Las acciones básica a realizar por las UCe son: analizar la información para la interpretación epidemiológica, económica y social de los datos registrados en la Red Universitaria para la toma de decisiones, la prevención, el control e investigaciones futuras; establecer acciones inmediatas y de seguimiento adecuados; disponer la capacitación a los integrantes de los PC y vincular actividades de forma coordinada con las instituciones de salud y demás sectores.
“La vigilancia en los planteles y edificios universitarios deben tener dos grandes vertientes: los datos que nos orienten para determinar entre la población quienes están sanas, enfermas o son sospechosas de tener algún problema y así dirigir nuestras acciones y que esos mismos datos generados nos permitan reorientar nuestras acciones y a tomar decisiones”.
Ramírez Riestra menciona que en caso de encontrar algún caso sospechoso, la persona sería evaluada y se deberá informar de inmediato a la coordinación de la UCe del sitio donde esté y luego enviada a su domicilio para su aislamiento y atención, hasta tener la certeza médica de su diagnóstico y recuperación. “Le estarían llamado cada 12 horas por teléfono, o correo electrónico, para darle un seguimiento del caso en compañía de su familia”.
Guadalajara, Jal., 8 de de mayo de 2009
Texto: Juan Carrillo Armenta
Fotografía: Internet
Edición de noticias: LCC Lupita Cárdenas Cuevas