Las universidades deben ser flexibles, más comprometidas con la sociedad, adaptarse a los nuevos tiempos de cambios incesantes, aprovechar las nuevas tecnologías y prestar más atención a la investigación, estas son algunas de las reflexiones con las que arrancó esta mañana en el marco de la XXIV Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara el XIV Encuentro de Investigación Educativa, que este año tiene como tema central: Temas educativos emergentes a doscientos años de la Independencia.
El vicerrector ejecutivo de la Universidad de Guadalajara, Miguel Ángel Navarro Navarro, a nombre del Rector general, Marco Antonio Cortés Guardado, lamentó en el discurso inaugural la siempre tradicional reserva que los Gobiernos federal y estatal destinan para la investigación en nuestro país. “Cada año vemos cómo nuestras autoridades no asignan ni siquiera el uno por ciento del Producto Interno Bruto a la ciencia y a la tecnología”.
“Es conocido cómo Singapur o Nueva Zelanda, por mencionar algunos países, han registrado un gran crecimiento económico, en buena medida por los recursos destinados a la investigación, desarrollo tecnológico y aplicación de la ciencia. Esos son medios a corto y largo plazo para desarrollar sus sociedades. Su idea de los recursos financieros destinados a estas áreas son una inversión y no un gasto improductivo como piensan en América Latina y sobre todo en México y en Jalisco. La investigación son elementos básicos para combatir la pobreza, el desempleo y la salud”, expresó.
Agregó Navarro Navarro que a pesar de la “corta visión de nuestros representantes”, la aportación a la investigación en las universidades ha producido grandes beneficios en la vida nacional, sobre todo por la creación de nuevos posgrados, el hecho de que cada vez hay más investigadores y se ha elevado la publicación de estos conocimientos. “No cabe duda que la labor de cada investigador es primordial para conocer los problemas que aquejan a la educación en todos los niveles y buscar solución”.
El rector de la Universidad de Valladolid, España, Marcos Sacristán Represa, señaló que aunque la investigación no tiene una remuneración inmediata es imprescindible para la sociedad lo que se hace en las universidades. “En una sociedad del conocimiento, las universidades siguen siendo el reducto del conocimiento y juegan un papel fundamental, además de potenciar aquellos valores sociales que sirven para corregir los desequilibrios de una economía de libre mercado, que éste por sí mismo no es capaz de controlar”.
El rector de la Universidad de Burgos, España, Alfonso Murillo Villar, señaló la necesidad que tiene la necesidad de ser flexibles para dar satisfacción a las necesidades que tienen cada una en su propia región. “Eso nos obliga a romper con los parámetros ya conocidos, crear o adaptar nuevas carreras y adaptarnos a las nuevas tecnologías, que facilitan también la educación a la distancia. La investigación es urgente por la innovación constante que hay en este mundo, sobre todo porque en España 66 por ciento de la investigación científica la aportan las universidades.
El rector de la Universidad de León, España, José Ángel Hermida Alonso, agregó que “la educación es la sangre de la sociedad. Ese es el tema de mayor importancia, además debe propiciar una sociedad más abierta, justa y comprometida. La búsqueda del saber, la libre expresión, el pluralismo, la no discriminación, deben ser sus características principales”.
El encuentro estuvo presidido por el rector del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades, de la Universidad de Guadalajara, Pablo Arredondo Ramírez, que contó además con el rector de la Universidad Autónoma de Sinaloa, Víctor Antonio Corrales Burgueño, así como el presidente del Consejo Mexicano de Investigación Educativa, Hugo Casanova Cardiel.
Guadalajara, Jal., 30 de noviembre de 2010
Texto: Juan Carrillo Armenta
Fotografía: Francisco Quirarte
Edición de noticias: Lupita Cárdenas Cuevas