Desde el 27 de octubre, un día después del atentado en contra de Andrés González Negrete, chofer de Raúl Padilla López, la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) no realizó ninguna investigación al respecto y permitió que los acusados en ese momento y más tarde presuntos responsables del homicidio de Fernando González Sandoval, director de la preparatoria número 7 de la UdeG, operaran en total impunidad, señaló Alfonso Partida Caballero, académico de la casa de estudios y encargado de dar seguimiento a las investigaciones por petición de los familiares y afectados en estos dos casos.
“A partir del 27 de octubre no hay ninguna diligencia sustancial, consta en la averiguación previa, y es necesario destacar que primero el procurador aseguró que ambos hechos no estaban relacionados, pero después de que agentes de la Procuraduría incursionaron ilegalmente en casa de Andrés González Negrete (el sábado 12 de diciembre) para hacerle firmar algunos documentos cuyo contenido aún desconocemos, la situación cambia radicalmente y ahora dice que los hechos están relacionados”, señaló.
En su opinión, esta situación implica que si el procurador, Tomás Coronado Olmos, no está mintiendo, de haber actuado a tiempo y ordenar la detención o arraigo de los señalados por haber atacado a González Negrete (los hermanos José Richard y Gustavo Mancilla Valdez), el director de la preparatoria 7 estaría vivo.
Partida Caballero aseguró que el procurador mintió cuando dijo que los hermanos Mancilla Valdez se fugaron tras la denuncia por el atentado contra el chofer de Raúl Padilla López, por lo que no se logró arrestarlos.
“No es cierto, miente el procurador; los señores fueron y cobraron en la Universidad de Guadalajara, estuvieron en la FIL merodeando, fueron a cobrar a la PGJE el día 15 y el día 30 de noviembre”, aseguró el académico, quien confirmó que los hermanos Mancilla Valdez trabajan también para la Procuraduría estatal, por lo que no era fácil perderles la pista.
La actuación de la Procuraduría mueve a la sospecha, indicó Partida Caballero y afirmó que en lo personal cree que detrás de todo esto hay alguien más involucrado.
“No hubo un móvil para que trataran de privar de la vida a Andrés González Negrete; en su declaración él dice lo siguiente: ‘estoy seguro de que me agredió porque me tiene resentimiento, porque mi patrón, el licenciado Raúl Padilla me tiene más confianza a mí que a él’. Andrés hace una conjetura subjetiva y termina la frase diciendo: ‘no existe otro motivo por el que me haya querido matar’. Eso debió investigar el procurador”, afirmó.
Para García Caballero las omisiones de la Procuraduría provocaron la comisión de delitos por parte de servidores públicos y en ese sentido insistió en que el procurador Coronado Olmos no debe estar al frente de las investigaciones.
Tomado de la página electrónica del diario La Jornada Jalisco del día 16 de Diciembre de 2009. http://www.lajornadajalisco.com.mx/2009/12/16/index.php?section=politica&article=005n1pol