


La cantante Jaramar presentó su nuevo disco Fiestas privadas en el Festival Cultural de Mayo. Por tal motivo ofreció un concierto en el Laboratorio de Artes Variedades (Larva), ubicado en el Centro Histórico de la ciudad. El concierto fue posible gracias a la conjunción de esfuerzos del Festival Cultural de Mayo y Medios UDG.
Sirena sin mar y Echar el ancla fueron algunas de las canciones que interpretó Jaramar acompañada por Juan Castañón en las guitarras, Rodrigo Castro en trompetas, banjo y guitarra, Carlos Sánchez Vilches en contrabajo y tuba, Luciano Sánchez en la batería y Helena San en los coros.
Fiestas privadas, el décimo primero disco de Jaramar como solista y su primer trabajo de composición, contiene 15 canciones que rompen la frontera de géneros aún más que en sus producciones anteriores.
Conocedores han ubicado a Jaramar en el estante de música alternativa, ya que su proyecto es una fusión entre colores y texturas sonoras. A lo largo de su carrera solista, ella ha presentado su trabajo en los principales escenarios mexicanos, así como fuera de las fronteras del país. También ha colaborado en proyectos multidisciplinarios con artistas plásticos, videoastas y bailarines.
Es además pintora, escultora e ilustradora de libros y eso se refleja en su manera de abordar su creación artística. Ella concibe a sus canciones como pinturas sonoras y que cuando pinta crea canciones visuales. Su visión plástica ha estado siempre presente en su trabajo escénico y en varias de sus producciones discográficas donde ha incorporado imágenes creadas por ella.
Durante el concierto expresó su gusto por los viajes al interior de uno mismo. Para ella, “Hacer un disco de canciones, construir las canciones para ese disco se trata de un esfuerzo por darle volumen, sonido y forma tangible a los viajes armado a partir de las imágenes de los recuerdos”.
En su disco hay de todo: “Mucha agua; agua y sueños. Sueños de noche y sueños de día y manteles y avestruces y huellas en vasos de agua y sirenas con alas, todo moviéndose entre imágenes cercanas a las historias infantiles y a los cantos amargos de sirenas”.
La música de Jaramar busca cierta atemporalidad, una universalidad, una apertura a la incorporación de elementos provenientes de lados diversos. Cada uno de sus discos reúne canciones que buscan retratar estados emocionales, algunas veces contar historias y van desde interpretaciones muy básicas y minimalistas hasta arreglos complejos, desde canciones anónimas del siglo XIII hasta sus propias composiciones.
Guadalajara, Jal., 25 de mayo de 2012
Texto: Martha Eva Loera
Fotografía: DGM
Edición de noticias en la web: Lupita Cárdenas Cuevas