Intercambio estudiantil entre la UdeG y la UNAM

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El tema común a analizar es la violencia entre Guadalajara y el DF

Enfermedades sociales como la violencia doméstica y la que se experimenta en las calles de las grandes ciudades, son algunos de los objetivos comunes que analizan estudiantes de Trabajo Social de la Universidad Nacional Autónoma de México y de la Universidad de Guadalajara, por lo que participan en un intercambio institucional de una semana durante septiembre, informó la jefa del Departamento de Trabajo Social, del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH), maestra Martha Beatriz Perea Aceves.
 
Del 19 al 23 de septiembre estuvieron de visita en intercambio estudiantil nueve estudiantes y un profesor de la Escuela Nacional de Trabajo Social (ENTS) de la UNAM. Posteriormente, del 26 al 30 de septiembre, igual número de estudiantes y una profesora estarán en la ENTS de la ciudad de México.
 
 La académica recordó que este intercambio entre estudiantes que se realiza desde el año 2009 obedece a una política y convenio institucional entre ambas universidades con el objeto de resaltar lazos de vinculación y aprendizaje de los alumnos en esta especialidad.
 
“El acuerdo nos permite concretar una movilidad estudiantil y demostrar que el intercambio produce un avance en los alumnos gracias a la retroalimentación y la valoración que se produce al comparar diversas atmósferas académicas, curriculares, instalaciones y otros indicadores que fortalecen la formación del alumno. De igual forma, le otorgan identidad y pertenencia a su universidad”, dijo.
 
 Ambas metrópolis presentan hoy en común sobre todo en los temas de violencia “latente y en aumento en todas sus orientaciones debido a la falta de educación social. El problema lo estamos viviendo igual en las ciudades grandes, solamente cambian los actores y el contexto”, señaló Perea Aceves.
 
 Son tan abundantes los problemas resultantes de la violencia que se experimenta, que por estas épocas se realiza una reforma curricular que podría desembocar en una especialidad relativa a violencia intrafamiliar.
 
“Sin duda hay que impulsar un área específica de intervención porque se ha perdido el control de una expresión violenta que se ha vuelto cotidiana y que sólo se puede detener con la búsqueda de alternativas de educación y de prevención, configurando una disciplina social concreta que construya una conciencia social que asuma el crecimiento y el desarrollo de los individuos involucrados”, concluyó.
 
Guadalajara, Jal., 23 de septiembre de 2011
Texto: José Díaz Betancourt
Fotografía: Internet
Edición de noticias: Lupita Cárdenas Cuevas