El mundo es hostil para la mayor parte de las personas que viven exclusión, marginación, pobreza, falta de salud, de horizontes, de perspectiva y la mayor parte de las mujeres del mundo viven eso al doble, si son indígenas al triple, y si además son personas con discapacidad, al cuádruple, afirmó Marcela Lagarde y de los Ríos, doctora en antropología por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), quien lleva más de treinta años trabajando y luchando por la causa de las mujeres.
Marcela Lagarde impartió la conferencia “Aprendizajes de una feminista sobre la política, el poder y el Estado”, en el Paraninfo Enrique Díaz de León. El evento fue organizado por el Centro de Estudios de Género, de la Universidad de Guadalajara.
“Las mujeres son el sujeto excluido, no reconocido de la modernidad, cuya impronta es patriarcal, profundamente androcéntrica, extraordinariamente machista, misógina, homófona, lesbófoba, sectaria de todos los sectarismos, racista y clasista”, dijo.
Explicó que la utopía moderna tiene tres ejes fundamentales: democracia, desarrollo y progreso. En esos tres ejes los utopistas y humanistas, mayoritariamente hombres, pensaron en un mundo masculino, en un mundo de los hombres. “Lo que ofrecieron era una utopía entre los hombres, con las mujeres como soporte para sus vidas y excluyeron a las mujeres de una dimensión muy importante de la modernidad en la democracia, en el desarrollo y progreso”.
El feminismo se nutrió de un pensamiento crítico, revelador de cuán excluyente había sido la puesta en práctica de la modernidad en las sociedades. “De la utopía a la sociedad había un abismo infranqueable porque las mujeres del mundo, sobre todo de Occidente, quedaron fuera de esta utopía. Las feministas retomaron la utopía moderna y críticamente la deconstruyeron y plantearon qué democracia sí quieren”.
“Hicieron la crítica del desarrollo que ha caracterizado a la modernidad por ser un desarrollo depredador, destructor del medioambiente, hicieron la crítica del desarrollo industrial porque era depredador de la vida comunitaria y urbana y porque el desarrollo como educación, salud, como lugar en la polis, como lugar en el Estado y desarrollo democrático no llegaba a la vida de las mujeres”, dijo.
Las feministas actuales proponen un desarrollo alternativo, que se conoce en el mundo con el desarrollo con rostro humano o desarrollo humano sustentable con perspectiva de género.
El feminismo ha sido una de las aportaciones a la ciencia, la filosofía, las humanidades, la teoría política, tal vez más importante en la modernidad. Desde esa dimensión el feminismo es ilustrado. “Nos permite iluminar nuestra experiencia y ponerle reflectores al mundo, microscopios, telescopios y usar todas las lentes posibles para mirar atrás de lo evidente qué es lo oculto, lo no dicho, el engaño patriarcal, dónde está el engaño patriarcal a las mujeres”.
La presentación de la ponente corrió a cargo de la regidora de Guadalajara por el Movimiento Ciudadano (MC), Candelaria Ochoa Ávalos. Estuvo presente, además, Cándida Elizabeth Vivero Marín, coordinadora del Centro de Estudios de Género.
Guadalajara, Jal., 16 de enero de 2013
Texto: Martha Eva Loera
Fotografía: Abraham Aréchiga
Edición de noticias en la web: Lupita Cárdenas Cuevas