Duplica males del corazón o muerte la elevada cantidad de grasa en el cuerpo

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Dictan conferencia magistral Obesidad y Enfermedad Cardiovascular, como parte del programa del Congreso Internacional Avances en Medicina

La grasa corporal de un individuo es un factor que incidirá en el desarrollo de una enfermedad cardiovascular o la muerte, en relación a su porcentaje, el lugar de ubicación y la actividad metabólica, destacó el director del Programa Cardiometabólico y profesor de medicina en Mayo Clinic Collage, maestro Francisco López-Jiménez.
 
Al dictar la conferencia magistral: "Obesidad y Enfermedad Cardiovascular, una relación compleja", en el XV Congreso Internacional de Avances en medicina, organizado por los Hospitales Civiles de Guadalajara, ante un auditorio lleno, destacó que el diagnóstico de la obesidad es un reto, y más cuando el peso es normal.
 
"No podemos confiarnos en el índice de masa corporal como único marcador de obesidad. Que las personas que tienen alto contenido en grasa y un índice de masa corporal normal, están en un riesgo elevado, tanto de problemas metabólicos, como de muerte cardiovascular".
 
En rueda de prensa previa a su ponencia, reconoció que falta mayor cantidad de estudios para conocer más sobre la relación grasa-enfermedad, a fin de solucionar el problema, de no hacerlo habría una epidemia mucho mayor de enfermedades del corazón y las arterias en los próximos 10 años.
 
Aseveró que el riesgo de padecer enfermedades del corazón, relacionada con la grasa es cercano al 200 por ciento, es decir, una persona con elevado contenido de grasa, tiene doble probabilidades de morir o padecer  males cardiovasculares.
 
López-Jiménez, dijo que la grasa corporal afecta el colesterol en la sangre, la presión arterial y la forma que el cuerpo regula la insulina. Además, las grasas no se comportan todas iguales. La viceral, ubicada entre intestinos, hígado y la que rodea el corazón, que es la más maligna.
 
La que está en la parte superior del cuerpo, es mala o no protectora tal como sucede con la viceral. "Sin embargo, las grasas debajo de la piel en las piernas o en la cadera, de manera paradógica, parece tener efectos completamente opuestos a los que tiene la grasa en otras partes, es decir, se puede considerar protectora".   

Consideró que el problema en México es muy serio, ya que la genética y la dieta imponen una distribución corporal de la grasa de la negativa, es decir, poca grasa en las caderas y más grasa en el abdomen. Eso se suma a factores como sedentarismo, dieta alta en carbohidratos y tabaquismo.
 
En nuestro país, "el problema de obesidad central, que es cuando se tiene una cintura más grande que la cadera, es quizá más grave y de las cifras que he visto, por ejemplo en mujeres, cerca de la mitad de las mujeres en México se pueden considerar con obesidad central, y en los hombres, los datos varían, del 30 a 50 porciento. Esas son cifras de hace 10 años".
 
Guadalajara, Jal., 22 de febrero de 2013
Texto: Eduardo Carrillo
Fotografía: HCG
Edición de noticias en la web: Lupita Cárdenas Cuevas