Ante el inminente impacto económico por el incremento de aranceles en las exportaciones de jitomate –que afectará a 400 mil empleos directos–, el gobierno mexicano debe de promover la reconversión de cultivos y la búsqueda de mercados alternativos para su venta, declaró en rueda de prensa el investigador del Departamento de Mercadotecnia y Negocios Internacionales, del Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas (CUCEA), maestro Javier Orozco Alvarado.
El Departamento de Comercio de Estados Unidos de América (EUA) aprobó imponer una cuota compensatoria de 17.5 por ciento sobre las exportaciones de jitomate rojo, con lo cual se reanuda el “Acuerdo de Suspensión a la Investigación Antidumping a las Exportaciones Mexicanas de Tomate”, que estaba detenido por dos prórrogas de 1996 y 2013. Esto ha generado alarma en el sector agrícola mexicano.
“¿Cuáles son las consecuencias? Simplemente, hay una baja tasa de crecimiento económico. La estrategia del gobierno mexicano tendría que ser impulsar el cambio de cultivos hacia productos que estamos actualmente importando, y de los que somos fuertemente dependientes de Estados Unidos”, subrayó el catedrático.
Desglosó que el jitomate, el aguacate y el pimiento son los tres productos agroalimentarios más vendidos desde México. Según datos de EUA, 84.9 por ciento del jitomate que consumen los estadounidenses es de origen mexicano, por lo cual, prácticamente, uno de cada dos jitomates que se consumen allá se cosechan en nuestro país.
México produce un millón 800 mil toneladas de jitomate, que representan 400 mil empleos directos y un millón indirectos, que se pueden ver afectados si no se resuelve el problema del arancel de 17.5 por ciento. Además, los precios subirán hasta 30 por ciento en territorio estadounidense, según cálculos del investigador del CUCEA.
“México es el principal exportador de jitomate en el mundo. Sus principales mercados son EUA, Reino Unido, España, Alemania, Suiza y Australia. Otro de los grandes consumidores de jitomate es Italia. Entonces, lo que tendríamos que hacer es buscar nuevos mercados”, abundó el investigador de la UdeG.
Orozco Alvarado añadió que el problema que puede enfrentar el Presidente Donald Trump, por esta decisión, es la animadversión de la sociedad estadounidense, aunque pueda tener la simpatía de los productores de Florida y de los sectores que ven el libre comercio como una amenaza.
“Mientras no se ratifique el TMEC, que establece que no habrá aranceles temporales ni estacionales para productos agrícolas mexicanos, Estados Unidos está violando los acuerdos y, por ello, México tiene argumentos legales para actuar”, agregó.
En Jalisco se producen 200 mil toneladas de jitomate. Somos el cuarto lugar en una lista que encabeza Sinaloa, donde se produce casi un millón de toneladas. Nuestra entidad, además, es el quinto lugar en superficie sembrada.
A t e n t a me n t e
"Piensa y Trabaja"
Guadalajara, Jalisco, 16 de mayo de 2019
Texto: Julio Ríos
Fotografía: Adriana González | Fernanda Velázquez