Una mujer, en su vida cotidiana, trabaja un promedio de 14 a 16 horas diarias. Y a pesar de esto, percibe menos ingresos que un hombre. Las políticas públicas, por consiguiente, deberían de ir enfocadas en abatir esa brecha de desigualdad económica; así lo consideraron especialistas de género de la Universidad de Guadalajara (UdeG).
“Ese es el promedio, 14 horas. Pero, seguramente, en muchas mujeres se dispara. Simplemente hay que hacer un registro de sus actividades hora por hora para ver que ese famoso equilibrio de ocho horas de trabajo, ocho horas de diversión y ocho horas de descanso, es una entelequia. Las mujeres se van por encima del tiempo que deberían de dedicar para ellas, para sus intereses, para su vida recreativa”, declaró la Coordinadora de la Cátedra Unesco de Género, Liderazgo y Equidad, con sede en la UdeG, doctora Rosa Rojas Paredes.
Consideró que no existen políticas públicas que mejoren la vida cotidiana con enfoque de género, y que México va tarde en este renglón. No obstante, se eliminan programas como las estancias infantiles, enfocadas en mejorar la calidad de vida de las mujeres.
La Presidenta de la Asociación de Mujeres Académicas de esta Casa de Estudio, doctora Raquel Partida Rocha, cuya especialidad es la brecha salarial de género, añadió que los hombres ganan, en promedio, 20 por ciento más que las mujeres, aunque hay casos en que se acrecenta.
“Donde hay menos paridad es en puestos directivos, pero entre más empobrecidas estamos las mujeres, hay más igualdad. A mayor cualificación pensaríamos que las mujeres ganaríamos más, pero se acentúa más la brecha. Es una contradicción. Las posiciones más importantes las tienen los hombres”, afirmó.
La brecha salarial será uno de los tres temas que se abordarán en el Primer Congreso Iberoamericano de Políticas Públicas de Igualdad de Género; el segundo serán las políticas públicas, y el tercero la familia y vida cotidiana. Los tres se interrelacionan.
La UdeG albergará a este primer congreso, el próximo 16 de julio, en el auditorio Adalberto Navarro Sánchez del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH), La Normal. Es auspiciado por la Red Iberoamericana de Trabajo, Género y Vida Cotidiana, cuya Directora Internacional es la doctora Sofia Pérez de Guzmán Padrón.
“Compartiremos las visiones que tenemos desde la investigación, desde la academia, sobre los temas de perspectiva de género en las administraciones, en los gobiernos, en los municipios no sólo de Jalisco y México, sino a nivel internacional. Vendrán compañeras de Cuba, de El Colegio de la Frontera Norte, de la Universidad Autónoma de Guerrero, de la Universidad Autónoma de Nayarit. Buscamos que sea un espacio de reflexión y análisis para influir en la perspectiva de género en todos los ámbitos que tienen que ver con los sectores productivos, públicos y privados, y armonizar con los Objetivos del Milenio de Desarrollo Sustentable y Perspectiva de Género, rumbo al año 2030”, dijo Partida Rocha.
Tanto Rojas Paredes como Partida Rocha aplaudieron el que la UdeG emite ya los títulos que distingue género en sus egresadas y egresados. Lo calificaron como “un gran primer paso”, luego de una lucha de los colectivos feministas.
Explicaron que, independientemente de lo que digan las voces patriarcales, el lenguaje incluyente debe prevalecer, pues implica cambios culturales: “Lo que no se nombra se invisibiliza”, añadió Rojas Paredes.
Partida Rocha subrayó que las mujeres académicas de la UdeG participaron en la integración de una iniciativa de ley para reducir la brecha salarial, que fue presentada, precisamente, este 10 de julio en el Congreso de Jalisco por el diputado local Héctor Pizano Ramos.
“Esto lo trabajamos a partir de un diagnóstico de brecha salarial que realizamos en 32 municipios, hace tres años. Hoy estamos contentos porque seremos la primera entidad en tomar la sartén por el mango. Que ya la hayan subido al pleno del Congreso significa que vamos para delante”, informó Partida Rocha.
A t e n t a me n t e
"Piensa y Trabaja"
Guadalajara, Jalisco, 10 de julio de 2019
Texto: Julio Ríos
Fotografía: Adriana González