No obstante el potencial que tiene Jalisco en materia de ecoturismo, turismo rural y de aventura, falta una política estatal sólida para promocionarlos, capacitar a prestadores de bienes y servicios, además de generar conciencia entre visitantes para cuidar el medio ambiente y consumir productos locales.
La académica del Centro Universitario del Sur (CUSur), de la UdeG, Claudia Llanes Cañedo, lamentó que la secretaría de este rubro en el estado, promueva más los destinos como Guadalajara o Puerto Vallarta, o bien esté más preocupada por los campos de golf y los hoteles resort.
Explicó que, por ejemplo, hay empresas privadas de turismo de aventura que realizan actividades deportivas en áreas naturales protegidas, pero detalló que pocas tienen personal capacitado y consciente para proteger el medio ambiente.
Otro caso son los ejidos que manejan turismo rural, pero que “no tienen acceso a la promoción. Eso le critico a la Secretaría de Turismo”. Adicional a esto, es necesario promover en el turista que no tire basura en el sitio que visita, además de impulsar el consumo de productos y servicios locales.
Ya que, comentó, cuando existen hoteles de cadenas multinacionales en áreas rurales, por lo general “explotan el recurso para ellos, y los trabajos que generan, son mal pagados, rotatorios, explotan a las mujeres, igual que en el turismo tradicional”.
La maestra en turismo y recreación rural, Llanes Cañedo, resaltó que Michoacán es un ejemplo en el desarrollo de turismo alternativo, ya que trabaja con áreas rurales para generar una oferta integrada, con promoción, guías locales, entre otros aspectos.
Acerca de los diferentes tipos de turismo alternativo, la profesora del Departamento de Desarrollo Regional, del CUSur, comentó: el ecoturismo permite sensibilizar a la población respecto a la naturaleza, mediante la observación de flora y fauna. Esta actividad puede ser realizada en bicicleta o a pie, y busca el menor impacto al medio ambiente.
Para este turismo hay mucha oferta: el parque nacional Nevado de Colima, con un centro de educación ambiental y senderos de interpretación, así como la sierra de Quila, que es área natural protegida, con espacios para visitantes. “Ésta es una época muy bonita para visitarla”.
Para el caso del turismo rural, que abarca acciones para conocer tradiciones, producción agrícola y gastronomía, hay opciones: una es la más empresarial y cara, que son las haciendas y casas rurales, pero que en el estado están más profesionalizadas. También hay alternativas como los ranchos turísticos.
En el turismo de aventura manejan opciones deportivas (como escalada, rapel y campamentos). Este tipo de turismo es manejado por empresas privadas. “En Jalisco no somos fuertes en empresas ejidales que manejen esto, pero también las hay”.
Guadalajara, Jal., 23 de junio de 2008
Texto: Eduardo Carrillo
Fotografía: Internet
Edición de noticias: LCC Lupita Cárdenas Cuevas