Primordial la conservación de bienes muebles e inmuebles

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Hoy concluye II Coloquio de invierno de la Red de Políticas Públicas de la UdeG, con el tema “Jalisco: problemas y capacidades de respuesta”

“Cuando hablamos de cuestiones de conservación lo primero que se nos viene a la mente es hablar de vivienda o edificios patrimoniales, pero ¿qué pasa con los bienes muebles integrados a los bienes inmuebles? Existen leyes y reglamentos, pero de alguna manera poco se hace para conservarlos a pesar de que son fundamentales en la vida de una sociedad. Al irlos perdiendo también perdemos nuestras tradiciones y raíces”, destacó el maestro Ernesto Flores Gallo, Rector del Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño (CUAAD).
 
Lo anterior lo mencionó al moderar el panel “Planeación territorial, vivienda y movilidad”, realizado en el marco del II Coloquio de invierno de la Red de Políticas Públicas de la Universidad de Guadalajara, titulado “Jalisco: problemas y capacidades de respuesta”, donde destacó que las políticas públicas de conservación deben verse de manera integral con el fin de evitar afectaciones en el patrimonio.
 
“Todo lo que tiene que ver con el patrimonio son como piezas de rompecabezas que nos dicen lo que fuimos y lo que somos. Nosotros también debemos ser los conservadores del patrimonio que tenemos”, reflexionó el Rector del CUAAD.
 
El patrimonio de los bienes inmuebles tienen una relevancia histórica y artística, mientras que los bienes muebles están vinculados a una vida social y política, explicó la doctora Mercedes Josefina Hernández, quien mencionó que los muebles de uso doméstico también tienen un valor histórico.
 
“El mueble es un objeto que auxilia al hombre en la interacción de su espacio habitable. Le da identidad al espacio. Es un texto que nos va a decir los usos y costumbres en un tiempo determinado, por ello cabe en esa definición de patrimonio cultural”, dijo mientras mostraba imágenes de mobiliario original de siglos como el XIX, ubicado en el Congreso del Estado de Jalisco, en el museo ubicado en Palacio de Gobierno y en antiguos inmuebles ubicados en avenida Vallarta, entre otros espacios.
 
Sobre la repercusión de la escultura en el espacio urbano y su utilidad social y estética, la doctora Dolores Ortiz Minique, expresó que es posible mejorarlo y hacerlo más amable a través de lo que es el arte más antiguo en la historia: “La escultura se creó no sólo para galerías y museos sino para formar parte del espacio integral”, e indicó que la escultura “ha sido una fuente de investigación para los historiadores, para identificar razas y etnias”.
 
La académica habló sobre las esculturas que se encuentran en la ciudad como los “Arcos del Milenio”, “Pájaro de fuego” o “Pájaro Amarillo” y “Los cubos”, entre otras esculturas icónicas que “no son objetos decorativos, están pensadas para dialogar con el espacio y con la gente que lo vive. Debe tener una misión colectiva”.
 
En este panel que tuvo lugar en el Paraninfo Enrique Díaz de León, también participó el maestro David Zárate Weber, quien habló sobre el patrimonio edificado en Guadalajara. Destacó que la tendencia de la población “es de una sensibilidad extrema a que las cosas no desaparezcan, es decir a las demoliciones, sin importar el uso que se le dé al inmueble”.
 
El Coloquio continuará esta tarde con los temas “Educación media superior y superior” y “Desarrollo económico”. Por la noche serán presentadas las conclusiones.
 
 
A T E N T A M E N T E
"Piensa y Trabaja"
Guadalajara, Jal., 25 de febrero de 2016

 
Texto: Wendy Aceves
Fotografía: Oscar Rivera Evans