Ninguna fuerza política saldrá fortalecida en las elecciones del Estado de México, consideran académicos

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Edomex, laboratorio rumbo a 2018; Coahuila y Nayarit, entidades donde prevalece la política de familias, señalan académicos de la UdeG

Ningún candidato asegura –al menos en las encuestas- porcentajes suficientes para amarrar el triunfo en el Estado de México el próximo 4 de junio, por lo cual no habrá partido político que salga realmente fortalecido rumbo al 2018, independientemente del resultado.
 
Así lo señalaron académicos del Departamento de Estudios Políticos del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH), de la Universidad de Guadalajara (UdeG), al presentar un análisis de las elecciones locales del domingo 4 de junio, donde se renovarán las gubernaturas del Estado de México, Coahuila y Nayarit, mientras que en Veracruz se elegirán presidentes municipales.
 
El jefe de dicho Departamento, doctor Armando Zacarías, consideró que el escenario en el Estado de México es inédito, con cuatro candidatos compitiendo casi en igualdad de preferencias, algo parecido a lo que sucedió en Francia.
 
“Me parece que ninguna fuerza política va a salir fortalecida. Las distancias porcentuales entre cada partido son reducidas. Lo que hace pensar en que vendrán impugnaciones de todos los partidos”, indicó.
 
Señaló que inciden factores como el presunto apoyo de la sección sindical de los trabajadores de la educación al partido Morena, el supuesto uso de recursos estatales, federales y municipales para promover la imagen del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el crecimiento inusitado de Juan Zepeda, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), que incluso habría rebasado al Partido Acción Nacional (PAN), junto a la alta presencia de indecisos y el voto de castigo.
 
“Esto nos hace pensar que esa breve distancia técnica que hay entre estas fuerzas no dará resultado definitivo, ni con claridad. Esto para el 2018, es extraordinariamente importante”, apuntó Zacarías.
 
El doctor Andrea Bussoletti explicó que, en todo caso, el que podría salir fortalecido es Morena, ya que al control de varias delegaciones y la mayoría legislativa que tienen en Ciudad de México, se sumaría el Gobierno en el Estado de México.
 
Sin embargo, esto a su vez sería un arma de doble filo por el desgaste que significa tener el ejercicio de gobierno.
 
“El Estado de México es fundamental. Esa elección definirá nuevos equilibrios políticos, independientemente de quien gane, y más aún rumbo al 2018 en el que las fuerzas políticas habrán de pensar con quien aliarse y qué discursos presentar. Y todos quieren salir con más peso para negociar en la mesa de las alianzas”, agregó Bussoletti.
 
La académica Mónica Montaño Reyes señaló que en Nayarit, con el eventual triunfo de Antonio Echevarría, hijo del ex gobernador que inauguró la alternancia en ese Estado, se confirma que sigue dándose una "política de familias".
 
“En los estados pequeños sigue la política de familias, que se rolan el ejercicio del poder, que no ha trascendido a una política más plural. En Jalisco, o en el Estado de México, se habla de tres partidos que tienen posibilidades de triunfo y en estos estados pequeños no es así”, añadió Montaño Reyes.
 
El académico Antonio Elvira de la Torre dijo que Coahuila, donde hay ocho candidatos (dos de ellos en coaliciones), los ojos estarán puestos en lo que ocurra con el Partido Joven, fundado por el ex gobernador Humberto Moreira con el objetivo de acceder a una diputación.
 
“Es un estado que nunca ha tenido alternancia política, en el que la mayoría ha sido en los congresos para el PRI, y ha habido partidos satélite, por lo cual hay poca competitividad electoral y un escenario de familias políticas. El actual gobernador es hermano de Humberto Moreira, quien creó un partido para contender. Esto deja ver un rompimiento entre Moreira y el partido gobernante”, subrayó.
 
Coincidieron en que las alianzas entre PAN y PRD se dan porque a ningún partido le da ya para ganar por sí solo, sin embargo abonan a que no se eleve la credibilidad en los partidos políticos entre la sociedad y se crea que los candidatos independientes son todos buenos.
 
“Muchos independientes son políticos de partidos que se cambian de camiseta nada más y hay otros ejemplos no tan buenos como el de Layín (Hilario Ramírez, alcalde de San Blas)”, agregó Montaño Reyes.
 
 
 
A T E N T A M E N T E
"Piensa y Trabaja"

Guadalajara, Jal., 29 de mayo de 2017
 
 
Texto: Julio Ríos
Fotografía: Gustavo Alfonzo / Jorge Alberto Mendoza

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