Activemos la mente, programa en la UdeG para retardar el Alzheimer

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El Área de neurociencias, del CUCS, trabaja con personas con demencia

Especialistas del Centro Universitario de Ciencias de la Salud (CUCS) buscan retrazar la aparición de la enfermedad de Alzheimer en los pacientes que sufren demencia o deterioro cognitivo leve, mediante la estimulación mental y cognitiva.

Teresita Villaseñor Cabrera, jefa del Departamento de Neurociencias, del CUCS, informó que actualmente llevan a cabo el programa Activemos la mente, el cual tiene como objetivo brindar a los enfermos de demencia una vida con mayor calidad.

En el programa, ocho pacientes diagnosticados por geriatras y neurocirujanos con deterioro cognitivo leve reciben estimulación cognitiva, con lo que es posible que logren retrazar un tipo de demencia más grave.

“Si uno va estimulando a las personas con enfermedad de Alzheimer en las fases incipientes de la enfermedad, en las que la persona aún es consciente de que se le olvidan las cosas, de que va teniendo confusiones entre sus familiares o que ya no va teniendo autonomía y funcionalidad, pero es consciente, no quiere decir que se le va a quitar la enfermedad, pero, por lo menos, la presentación de la patología será más prolongada”.

La especialista explicó que mediante el programa, el paciente recibe de manera individual dos sesiones semanales de estimulación de la memoria, de la orientación y del sentido de la realidad. Además, los familiares también reciben asesoría para que en el hogar estimulen al paciente.

“Trata de ir estimulando el funcionamiento cognitivo de los diferentes procesos mentales, como la atención, la memoria, la capacidad de planeación y resolución de problemas, ya que vemos que en las personas con demencia en estadíos más avanzados, estas funciones cognitivas van disminuyendo o se van perdiendo, y la persona también va perdiendo funcionalidad y autonomía”.

El paciente es evaluado antes de comenzar con el programa y al finalizar las sesiones. Villaseñor Cabrera agregó que los resultados preliminares arrojan que las personas que tenían problemas para recordar el día de la semana y mes en que se encontraban, ahora logran recordar y tienen el sentido de orientación temporal. Además, la comunicación con los familiares es más eficaz y el proceso del pensamiento no es tan lento como antes.

“La memoria, como es una de las funciones que se deterioran con el envejecimiento, se trabaja con la llamada memoria de trabajo, la cual permite tener almacenada información que posibilite cumplir un objetivo. Si esta memoria está en buenas condiciones, se consolida el aprendizaje”, explicó. Grabar las placas de un automóvil o un número telefónico, son ejemplos de la memoria de trabajo.

La especialista hizo énfasis en que el proyecto de investigación realizado por el posgrado en psicología, pretende lograr que el enfermo tenga autonomía y comunicación con sus familiares, lo cual incidirá en la calidad de vida de él y de quienes lo rodean. De tener éxito, los pacientes con demencia del Hospital Civil “Fray Antonio Alcalde” e incluso la población jalisciense en general, podrían tener una nueva alternativa de tratamiento.

En el marco del Día mundial del Alzheimer, que será el próximo 21 de septiembre, Teresita Villaseñor recomienda poner atención en las personas mayores que pierden su autonomía, sus habilidades y sus capacidades básicas para recordar. Atribuir estos cambios a factores externos o psicosociales como la edad avanzada o la muerte de un pariente, es un error común de los familiares.

“Cuando el paciente va perdiendo su funcionalidad y autonomía, es cuando hay que pecar de exagerado, por decirlo de alguna manera, y descartar que no estamos ante un proceso de envejecimiento patológico”.

Guadalajara, Jal., 19 de septiembre de 2008
Texto: Wendy Aceves
Fotografía: Internet
Edición de noticias: LCC Lupita Cárdenas Cuevas